Antes de exponerse al sol aplicar la crema sobre la piel, incidiendo en las zonas frágiles del rostro. Repetir frecuentemente la aplicación en caso de exposiciones prolongadas y después de cada baño.
Se presenta en tubo de 50 ml.
AVENE THERMAL SPRING WATER (AVENE AQUA). C12-15 ALKYL BENZOATE. COCO-CAPRYLATE/CAPRATE. METHYLENE BIS-BENZOTRIAZOLYL TETRAMETHYLBUTYLPHENOL [NANO]. WATER (AQUA). CAPRYLIC/CAPRIC TRIGLYCERIDE. BIS-ETHYLHEXYLOXYPHENOL METHOXYPHENYL TRIAZINE. DIETHYLHEXYL BUTAMIDO TRIAZONE. GLYCERIN. SILICA. BUTYL METHOXYDIBENZOYLMETHANE. POTASSIUM CETYL PHOSPHATE. DECYL GLUCOSIDE. VP/EICOSENE COPOLYMER. ACRYLATES/C10-30 ALKYL ACRYLATE CROSSPOLYMER. BENZOIC ACID. BUTYLENE GLYCOL. CAPRYLYL GLYCOL. CARBOMER. DISODIUM EDTA. FRAGRANCE (PARFUM). GLYCERYL BEHENATE. GLYCERYL DIBEHENATE. HELIANTHUS ANNUUS (SUNFLOWER) SEED OIL (HELIANTHUS ANNUUS SEED OIL). OXOTHIAZOLIDINE. PROPYLENE GLYCOL. SODIUM BENZOATE. SODIUM HYDROXIDE. TOCOPHEROL. TOCOPHERYL GLUCOSIDE. TRIBEHENIN. XANTHAN GUM.
El sol es necesario para nosotros, pero sus radiaciones pueden tener efectos nocivos sobre nuestra piel. Los rayos UVA son altamente penetrantes y son los responsables del envejecimiento prematuro de la piel. Los rayos UVB estimulan la producción de melanina, sustancia que usa nuestro organismo para defenderse de la quemadura solar y provoca la aparición del bronceado. A largo plazo también provoca envejecimiento prematuro de la piel del rostro y son responsables de las insolaciones. La piel puede responder de diferentes formas a estas radiaciones, por eso el conocimiento de cuál es nuestro fototipo de piel es especialmente importante.