Se ha demostrado que, en personas con alergia solar previa, reduce un 75% los síntomas de la alergia y, en concreto, un 95% el picor.
Su fórmula contiene ectoína al 1% que refuerza el mecanismo de protección natural de la piel y la hace más resistente frente a las agresiones de la radiación solar.
La ectoína al 1% brinda a la piel un efecto hardening, haciéndola más resistente frente a las agresiones de la radiación EV. Además, protege las células uniendo las moléculas de agua a su alrededor, que forman un complejo protector y estabilizador de la membrana.
Este componente, combinado con un SPF 100+, convierte a Solar Allergy en el fotoprotector más potente para la piel fotosensible. Esto se debe a que ofrece una protección 2 veces superior al mínimo requerido en un protector solar SPF 50+ frente a los rayos UVA, estimuladores de la alergia solar. Eficacia demostrada.
Todo esto, junto con su exclusiva fórmula tixotrópica, logra una textura Fusion Fluid la cual, a través del calor y la fricción en la aplicación, se vuelve más fluida. De esta forma, se funde suavemente con tu piel, ofreciendo una rápida absorción y una extraordinaria sensación de ligereza.
Empezar el tratamiento 15-30 días antes de la exposición al sol y continuar durante todo el período de exposición.
Sobre la piel limpia, seca e intacta, aplicar generosamente la crema dos veces al día sobre las zonas afectadas o que se pueden afectar al ser más sensibles.
Mientras se esté expuesto al sol, reaplicar mínimo cada 2 horas.
Agitar antes de usar.
Se recomienda evitar la exposición al sol mientras la piel esté agredida, así como beber mucho líquido e hidratar correctamente la piel.
Se presenta en formato de 50 ml.